Al igual que el proyecto de las mascarillas, este surgió de la misma idea de utilizar arte para packaging, para esta ocasión elegí de nuevo el periodo rococó. Recopilé una serie de estudios en sanguinas del artista Antoine Watteau para poder adaptarlas a un empaque para pastelitos. El diseño que se eligió se basó en las características del arte rococó, ya que hay muchos elementos y decoración excesiva, casi no se dejaron lugares vacíos para la caja.
También elegí colores pasteles tomando en cuenta los colores predominantes en al arte de éste movimiento artístico. Para la tipografía escogí una fuente elegante con terminaciones gruesas y de color dorado con textura, para la envolvente elegía hacer un marco con rocallas, elementos decorativos muy utilizados en esa época.